Principios
DEMOCRACIA PARTICIPATIVA, REPRESENTATIVA Y SOCIAL.
La democracia como sistema de gobierno parte de la base de la legitimidad de los actos tendientes a resolver los problemas del ejercicio del poder, partiendo de la elección que debe realizar la ciudadanía de los gobernantes y representantes que se harán cargo poder público en una sociedad organizada y plural, esto por medio del goce y disfrute de los derechos y libertades que como parte de una sociedad todas y todos tenemos derecho.
PLURALIDAD Y OPORTUNIDADES.
JUSTICIA SOCIAL
La justicia social, es un valor que promueve el respeto igualitario de los derechos y las obligaciones de cada persona en la sociedad. Se centra en la igualdad de oportunidades y en los derechos humanos, para una repartición justa y equitativa de los bienes y servicios básicos necesarios para el desarrollo de una sociedad en paz, tales como, la educación, la salud y los Derechos Humanos
VOZ CIUDADANA.
Las organizaciones de la sociedad civil, colectivos, grupos comunitarios organizados en todo el tiempo se han sentido ignorados, invisibilizados e incluso callados. El estado tiene una deuda enorme con la ciudadanía en este tema.
DERECHOS HUMANOS E INCLUSIÓN SOCIAL
Los derechos humanos son el conjunto de prerrogativas y son aquellos universales e inherentes al ser humano, sin que pueda existir distinción y/o discriminación alguna por motivos de residencia, sexo, nacional o étnico, color, religión, lengua o cualquier otra condición
La inclusión social asegura que todas las personas sin excepción puedan acceder con las mismas oportunidades a un bien, servicio o medio ambiente sin ninguna limitación o restricción.
LIDERAZGO POLÍTICO Y SOCIAL.
Desde Cambiemos México creemos necesario cambiar paradigmas y creencias tradicionalistas sobre el perfil de las personas que deben representar una sociedad plural, organizada y globalizada.
Es evidente que, en la vida política actual, los actores políticos, candidatos y candidatas postuladas por los partidos políticos, elección tras elección representan en su mayoría perfiles desgastados y poco atractivos a la ciudadanía actual, tal circunstancia ha venido acarreando con el paso de los años el abstencionismo en las urnas, no como única razón, pero si como una respuesta recurrente: los perfiles y las propuestas de las y los candidatos no convencen a la sociedad.